Un encuentro diferente

Este miércoles 15 de Junio celebramos nuestra ya tradicional cena de ‘final de curso’ en la terraza de la Parroquia de St Oleguer, en Barcelona.

Esta vez, no vamos nosotros a ‘su casa’ si no que son nuestros amigos los que se acercan a ‘nuestra casa’. Les podemos preparar una pequeña fiesta en su honor, mucha comida, refrescos y hasta música. Desi siempre prepara un pequeño repertorio en guitarra para la ocasión, y aunque está aprendiendo y no es como para un concierto oficial le pone tanto cariño e ilusión que ya lo esperamos con ganas.

Por una vez todos nos sentamos a la mesa, mezclados unos con otros, este año echamos de menos alguno de nuestros amigos de siempre pero en cambio también tuvimos alguna sorpresa como Carlos que hacía mucho tiempo que no veíamos y que está muy recuperado de salud y animado. A veces cuesta pero así es… unos aparecen, con otros perdemos el contacto, es todo muy libre y eso nos educa a entregar más gratuitamente, sin esperar tampoco que nos cuenten siempre en qué están y dónde están, si quieren allí estamos pero si desaparecen en algún momento aprendemos a respetar eso también.

Esta noche somos más iguales, se da una conversación más pausada, sin prisas, la comida nos la servimos unos a otros y el ambiente es de fiesta, alegría y agradecimiento por un vínculo que semana a semana nos hace más próximos, más ligados unos a otros. Nos despedimos con alguno que se marcha, con otros nos saludamos hasta el próximo miércoles, ya lo dicen que el roce hace el cariño y así va creciendo el roce y el cariño entre nosotros.

Leer más

Juan nos hizo puente con los recursos ya existentes

A Juan lo conocemos desde hace unos dos años, es un sevillano muy simpático, cada miércoles iniciamos la conversación de la misma manera ¿Qué tal Juan?  Y Juan: ‘aquí aguantando la mecha’ y se ríe. Tiene unos ojos azules preciosos, es muy amigable y siempre anda con su cerveza, se ve que de joven era una pieza.

Siempre acepta con gusto la comida que le ofrecemos y los pañuelos que le damos por su contínuo constipado.

Juan tiene memoria a corto plazo, y a pesar de vernos cada semana, para él es como si fuera la primera vez. Últimamente le estábamos viendo cada vez más en deterioro y con una tos preocupante, a pesar de esto, no quiere ir al médico.

Nosotros conocemos a una doctora en el CAP, se encuentra cerca de donde está siempre Juan, es muy amable con nuestros amigos de Proyecto Encuentro Acoge y le pedimos una cita para él. Lo hemos acompañado a la consulta en muchas ocasiones y la doctora le receta medicamentos, que le compramos nosotros, e intentamos que se acuerde de tomarlos, pero con su problema de memoria es muy complicado que los tome. También empezamos a hablar con Andrés, un trabajador de Arrels, que le conoce y le atiende.

Así que gracias a la ayuda de Arrels y Proyecto Encuentro Acoge Barcelona, mandando documentación sobre su estado de salud e insistiendo a los estamentos públicos de la gravedad de la situación, le pudimos conseguir una residencia en Barcelona, ¡En un tiempo récord!, además, era perfecta para Juan porque tiene un régimen bastante abierto, pueden salir durante el día, le sirven las comidas y no le ponen grandes restricciones.

A pesar de esto, no es fácil para él, a veces se olvida que tiene un lugar donde dormir, pero entre Arrels y nosotros le vamos recordando y acompañando hasta su residencia. A pesar de no recordarnos, nos deja ayudarle, le pedimos que deje sus cosas y nos acompañe al coche y Juan, echándole un último vistazo a sus cosas, nos mira y de alguna forma nos reconoce y viene con nosotros.

Ese vínculo que hemos hecho no está grabado en su memoria, pero quizás sí en su corazón.

Leer más